Llueve sobre Alaró, intermitente,
En espera del verano
Agua que surge corriente
Del soplo inmortalizado
Son los Dioses cuando sienten
Sus esperanzas en vano
Los que empujan vehementes
Agua y viento huracanado
Cruzan los cielos lanzados
Entre nubes que entretienen
Blancos caballos alados
Y sobre tales jinetes
Cabalgan su mundo amado
Sembrando guerras y muerte